“A los que no les interesa la política les gobiernan otros a los que sí les interesa”. Winston Churchill.
El próximo domingo, día 22, la ciudadanía tiene una cita con las urnas. Si todas las elecciones son importantes, esta es crucial. Nos jugamos lo más interesante de la política, la cercanía. Muchas veces nos preguntamos si también es política: poner un semáforo cuando hace falta, si las calles son transitables y están limpias, si nos llega el agua a nuestras casas en buenas condiciones, si por la noche se puede dormir, si hay guarderías, si tenemos un colegio o un instituto próximos, si las facultades están cerca y a precios asumibles, si los centros de salud o los hospitales funcionan y no tenemos que pagar nada aparte (aun costando mucho dinero el servicio que nos prestan), si hay plazas en las residencias de mayores y en qué condiciones están, si vamos a un centro oficial y hay suficiente personal para atendernos adecuadamente... Todo esto también es política, es la que vivimos en nuestro día a día. Por eso son tan importantes estas elecciones.
De lo que se trata ahora es de votar quién va a ser nuestro alcalde y quién el presidente de nuestra Comunidad. Tiempo habrá el año que viene, cuando lleguen las elecciones generales, de votar qué opción política queremos para gobernar España. Pues, con ser importantes los partidos, entiendo que las personas son lo más importante. Ya nos ha demostrado José María Barreda ese pensamiento, esa actuación. Cuando ha hecho falta, se ha enfrentado a quien ha sido necesario, dentro y fuera de su partido, para defender los intereses de las personas de Castilla-La Mancha, como antes lo hiciera José Bono. Tan es así, que es el presidente de Comunidad Autónoma mejor valorado de toda España por sus paisanos, según el CIS (Centro de Investigaciones Sociológicas).
Ante esta realidad, uno se pregunta cómo es que según algunas encuestas están tan igualadas las intenciones de voto. No es difícil inferir una posible dejadez, por parte de unos, y resultar confundidos por la política nacional, por parte de otros. El pasado domingo, declaraba el presidente Barreda en Tembleque (Toledo): “A ver si alguno por un cabreo va a votar a otra opción o se va a quedar en su casa el día 22, porque el día 23 se puede encontrar con una situación infinitamente peor”. Escuchando estas palabras del presidente, yo recordaba la situación vivida por los británicos tras las últimas elecciones generales. Muchos de los votantes laboristas se quedaron en su casa, ganó Cameron (ese cuyas políticas tanto le gustan a Rajoy) y ahora van de una manifestación en otra contra los recortes sociales, las impresionantes subidas académicas y el deterioro de los servicios públicos, entre otros.
Durante muchos años hemos estado en España sin poder ejercer el derecho al sufragio. Paradójicamente, aquellos que menos interesados estaban en volver a colocar una urna sobre la mesa, son ahora los más fervientes usuarios cada vez que son llamados a votar, y muchos de quienes clamaban por ejercer su derecho al voto, ahora resultan más remisos y tienen que ponerse muchas cosas en línea para que se acerquen a la querida urna. Yo les pediría que si no lo hacen por ellos y por sus familias, al menos que vayan a votar por sus paisanos el próximo día 22 en estas elecciones Locales y Autonómicas. Esa es la mejor encuesta, esa es la mejor manifestación.
Publicado en:
http://www.dclm.es/noticia.php?noticia=98088, 16-05-2011
Lanza de Ciudad Real, páginas de opinión, pág. 39, 19-05-2011