lunes, 19 de diciembre de 2016

Muros y vallas

El mundo se va polarizando y cada vez está más divergente. Políticos populistas, aprovechando la coyuntura del descontento de amplias capas de la población con los políticos al uso, están llevando a los países a adoptar posiciones que ya parecían superadas por las lecciones recibas de la Historia. Algunos de esos políticos son proclives a levantar muros y vallas que impidan la llegada de refugiados y otras migraciones humanas. Ejemplos de ello los tenemos en muchos países. El presidente electo de los EE.UU., Donald Trump, ya lo prometió en campaña para dividir América en dos mitades asimétricas, con un muro y vallas que les separen del resto del continente, a partir de México hacia el sur.

La frontera sur de Europa, en Ceuta y Melilla, a cuyas vallas se les añadieron concertinas, que no impiden el paso de inmigrantes, pues llegan, pero en peores condiciones; el muro teñido de sangre que separa la India de Bangladesh, y también el  de aquel país con Pakistán; el muro que separa Cisjordania e Israel, uno de los más cruentos; Turquía y Hungría están construyendo sendos muros para evitar la entrada de refugiados; el que separa las dos Coreas; Nicosia, capital de Chipre, la única dividida actualmente por un muro; Arabia Saudí, con una valla de 900 kilómetros que la separa de Irak, y otra valla entre éste y Kuwait… Los muros son la expresión física de la incomprensión ideológica y de los intereses subyacentes.

Hasta ahora se han mencionado los muros y vallas físicos, pero hay otros muros que dividen las sociedades: la brecha entre los que más cobran y los que menos; la brecha salarial entre mujeres y hombres; la distancia cada vez mayor entre pobres y ricos; las violencias de género; el menosprecio a los demás, las venganzas, los orgullos, los egoísmos… En definitiva, el estatus de poder que es lo que crea la segregación, la desigualdad, y hace lo posible por mantenerlo.

Y en todo este ambiente, el mundo cristiano se dispone a celebrar un año más el nacimiento del Salvador, que predicó el amor a nuestros semejantes, al prójimo, incluso a nuestros enemigos, que hizo milagros… y al que colgaron de un madero. ¡Qué mundo este! Más bien parece que no hayamos aprendido mucho en estos veintiún siglos. Estos días son buenos para que entre luces, belenes, villancicos, cenas y compras masivas, reflexionemos un poco sobre esto.

Publicado en:
http://imasinformacion.es/not/19363/muros-y-vallas/
http://dclm.es/opiniones.php?id=2907
http://www.lanzadigital.com/news/show/opinion/muros-y-vallas/108822
http://www.clm24.es/opinion/casimiro-pastor/muros-y-vallas/20161220083041140380.html. 
Lanza de Ciudad Real, edición en papel, pág. 31 de opinión. 20-12.2016


viernes, 16 de diciembre de 2016

El nuevo lapsus de Rajoy


En la reciente cena de Navidad del PP madrileño, Rajoy al despedirse les espetó: “Hasta dentro de muy poquito y ya preparando las próximas elecciones”, lo que descolocó a propios y a extraños. La vicepresidenta, Soraya S. de Santa María, le quitó hierro al ser interrogada por periodistas, aduciendo ser por causa del cansancio acumulado. Pero Rajoy no da puntada sin hilo, pues ha demostrado ser más listo de lo que sus detractores creen, si bien ahora nos despista porque le han debido de curar ese tic que tenía en el ojo y que, a modo de polígrafo, lo delataba cuando mentía.

Rajoy actúa como esos delanteros que corren poco, pero que están por el área contraria y rematan a gol cualquier pelota que pase por allí. Recuérdese que era el peor posicionado cuando el “dedísimo” de Aznar lo señaló para sucederlo, compitiendo con Rato y Mayor Oreja. En el Congreso de Valencia lo eligieron como mal menor porque el PP se dividía entre “aguirristas” y “gallardonistas”; y ahí está, de presidente del gobierno después de una legislatura y cuarto y “otros cuatro años de ésta”, declara él sin que se le guiñe el ojo. Aunque la duración de esta legislatura está por ver.

El más reciente lapsus, que no el último, es más bien un aviso a navegantes por si le ponen excesivas trabas a su gobierno. A partir de mayo podría convocar terceras elecciones y pillar con el paso cambiado al PSOE, pues este partido se encuentra regido por una gestora mientras “sanchistas”, “susanistas” y “mediopensionistas”, por decir algo, se reparten las razones y las culpas de que el partido esté como está. La gestora, cuya legitimidad se cuestiona, debería convocar sin prisas, pero sin pausas, con la mayor brevedad posible, un proceso de primarias y un congreso (extraordinario u ordinario) que ponga capitán y rumbo al barco.

Unidos Podemos, dividido entre “iglesistas”, “errejonistas” y “anticapitalistas”, con la absorbida IU, y Ciudadanos ya están haciendo los deberes por si acaso, y en el mes de febrero próximo ya tendrán resueltos sus respectivos congresos. También el PP, que además está en el gobierno y eso da mucha tranquilidad. Si el PSOE está pensando en alargar el breve tiempo que se le supone a la gestora, hasta que determinados intereses territoriales estén satisfechos, acercándose al calor en lo meteorológico, correrá un riesgo que le puede pasar una importante factura, que luego a ver quién está dispuesto o dispuesta a asumir.

Publicado en:
http://dclm.es/noticia.php?id=48974
http://www.lanzadigital.com/news/show/opinion/el-nuevo-lapsus-de-rajoy/108691
http://www.clm24.es/opinion/casimiro-pastor/nuevo-lapsus-rajoy/20161217093751140088.html
Lanza de Ciudad Real. Edición en papel. Pág. 30. 19-12-2016

lunes, 12 de diciembre de 2016

El prójimo


Una vez celebrado el tercer domingo de Adviento, ya más cerca de la Navidad, nos empezamos a llenar de buenos deseos y de esperanza sobre un mundo mejor mientras compramos los turrones y otras viandas típicas de nuestra cultura. Como cada año, celebramos el nacimiento de Jesús de Nazaret, que nació en un pesebre, pues sus padres hubieron de desplazarse para ser censados y, al no tener alojamiento, lo único que encontraron fue ese sitio al que llamamos eufemísticamente “el portal de Belén”.

Las religiones monoteístas conocidas tienen al prójimo como esa persona a quien debes amar “como a ti mismo”; el Antiguo Testamento presenta numerosas citas sobre el tema. Jesús en su vida pública predicó en muchas ocasiones sobre el amor y la ayuda al prójimo, y así ha llegado hasta nuestros días a través del Evangelio y de las iglesias cristianas (Sermón de la Montaña, parábola del buen samaritano…). Es tal el compromiso cristiano con el prójimo que Jesús incluso nos exhorta a amar a nuestros enemigos.

Así pues, no se entiende que en esta Europa de tradición cristiana estemos como estamos con lo que hemos dado en llamar el “problema” de los refugiados. El problema lo tienen esas personas que tenían su vida normal y las guerras las han echado a las aguas del Mediterráneo en sentido literal, convirtiendo el Mare Nostrum en un inmenso cementerio. Otros pudieron cruzar fronteras y llegar a los países de acogida, y qué acogida en muchos casos. De lo que un refugiado no es consciente es que cuando pone el pie en una patera entra en la campaña electoral de Alemania, de Francia, de Italia… y hace crecer a los partidos de extrema derecha.

Dejémonos de hipocresía, releamos el Evangelio para tener fresco el mensaje de ese Niño Jesús que viene el día 25, o seamos simplemente humanos, con independencia de las creencias, y apliquemos la regla de oro universal: tratar a los demás como nosotros quisiéramos ser tratados.

Publicado en:
http://imasinformacion.es/not/19321/el-projimo/
http://dclm.es/shh.php?id=3392
http://www.lanzadigital.com/news/show/opinion/el-projimo/108493
http://www.clm24.es/opinion/casimiro-pastor/projimo/20161213084047139494.html
Lanza de Ciudad Real. Edición papel, pág. 31. 13-12-2016

viernes, 2 de diciembre de 2016

La labor silenciosa


Todo el mundo habla de la labor de quienes trabajan e incrementan el PIB del país, pero nadie habla de quienes desarrollan un trabajo en segundo plano para que aquéllos puedan trabajar. Son personas jubiladas, por ejemplo, todavía útiles desde el punto de vista social; es decir, que no requieren de ayuda, sino que más bien la prestan ellas a la sociedad. Son los abuelos que llevan y recogen a sus nietos del colegio, al médico, etc., que hacen la compra y todo aquello que pueden para que los hijos no pierdan tiempo de trabajo.

¿Qué valor tiene en términos de PIB la labor que desarrollan esas personas útiles, ahora que todo se cuantifica? Son personas que están cobrando una merecida pensión del Estado, que están ayudando a su descendencia a salir adelante. Es decir, una vez conseguido su merecido retiro, por el que han estado cotizando durante cuarenta años, o incluso más, se ven en la obligación de atender a sus hijos y a sus nietos, quitándose literalmente el pan de la boca, en algunos casos. Son el sostén de muchas familias hoy en España, con unas pensiones en muchos casos exiguas.

Ha llegado la hora de plantearse una subida de las pensiones tal y como estaba establecida hasta que la modificó el gobierno del PP, es decir, ligada al IPC. Recuérdese que durante los ocho años del gobierno de ZP hubo un incremento de las pensiones mínimas del 27% y que la bolsa de las pensiones se dejó en 67.000 millones de euros. Quizá sea necesario recordar también que en los cinco años, hasta ahora, de gobierno de Rajoy las pensiones han ascendido sólo un 0,25% anual, habiéndolas desligado por completo del IPC, y que la bolsa de las pensiones está ahora más baja que el agua de algunos pantanos, al nivel del barro. Bolsa a la que se le acaba de dar un nuevo hachazo.

La necesaria y justa adecuación del poder adquisitivo de las pensiones no es sólo porque se la merezcan nuestros pensionistas, es porque es un factor de equilibrio y paz social. Es algo bueno para todos, pues es un elemento dinamizador de la economía, que revierte de manera positiva en el conjunto de la sociedad. 

Publicado en:
http://www.clm24.es/opinion/casimiro-pastor/labor-silenciosa/20161202091301138538.html
http://www.lanzadigital.com/news/show/opinion/la-labor-silenciosa/108049
http://dclm.es/noticia.php?id=48645
Lanza de Ciudad Real, edición en papel, página 30 de opinión.
http://imasinformacion.es/not/19301/la-labor-silenciosa/