Hace cosa de un par de semanas,
la policía detuvo en el aeropuerto de El Prat (Barcelona) a una chica de 20
años, de nacionalidad panameña, que llegaba en un vuelo de los llamados
calientes procedente de Bogotá (Colombia), porque presentaba una actitud
sospechosa al no responder de manera coherente a las preguntas sobre su
presencia en España. Al ser registrada por una agente, comprobaron que tenía
gasas ensangrentadas bajo sus pechos. Una vez llevada al cercano hospital de
Bellvitge, certificaron que le habían practicado una mala operación, aún
sin cicatrizar, para introducirle en cada mama una bolsa con cocaína; en total
casi 1,4 kilos.
He de confesar que me impactó la
noticia. Uno se hace sus conjeturas sobre qué puede haber llevado a una chica,
en la flor de la vida, a dejarse hacer ese tipo de carnicería en una parte tan
íntima para hacer de “mula” en ese sórdido mundo del tráfico de drogas, y
cobrar de media unos 4.000 euros por transporte. La conclusión no es otra que la
miseria de unas personas y lo miserables
que son quienes se aprovechan de ellas.
En el mundo hay básicamente tres
mercados miserables: El tráfico de drogas, el tráfico de armas y el tráfico de
personas. Luego existen las subdivisiones. El denominador común es que unos
seres humanos ganan ingentes cantidades de dinero a costa del sufrimiento vital
de congéneres suyos. En el tráfico de armas, los Estados suelen mirar hacia
otro lado mientras ponen el cazo, pero los otros dos mercados se escapan a su
control. La generación de enormes cantidades de dinero negro, hace de su
blanqueo un lucrativo negocio del que no son ajenos los llamados criminales de
guante blanco; algunos, conocidos y reputados ciudadanos.
En una crisis como la actual, que
algunos califican ya de auténtica tercera guerra mundial, pues el sufrimiento
que está ocasionando es de ese calibre para muchas personas, los que ganan
dinero de manera indecente están ganando más todavía. Pero esta sociedad se
diferencia de la de otras épocas en que hay mucha más información. Ahora, a los
miserables les resulta más difícil ocultar sus tejemanejes.
La clave está en que los
gobernantes de los territorios se sumen al pueblo en defensa de los intereses
de la mayoría y que la
Justicia ponga a buen recaudo a quienes se salten las leyes,
algo que ya han hecho en Islandia. Solo así pararemos el decidido avance hacia
el desastre general y emprenderemos la senda de la recuperación. Recuperación
que será buena para todos, también para los miserables, qué le vamos a hacer.
Publicado en:
http://www.dclm.es/opiniones.php?id=443. 28-12-2012.
Lanza de Ciudad Real, edición en papel, pág. 28. 30-12-2012.
Artículos posteriores, relacionados:
http://www.publico.es/dinero/448177/condenados-en-islandia-los-dos-primeros-banqueros-por-la-crisis-financiera.
Publicado en:
http://www.dclm.es/opiniones.php?id=443. 28-12-2012.
Lanza de Ciudad Real, edición en papel, pág. 28. 30-12-2012.
Artículos posteriores, relacionados:
http://www.publico.es/dinero/448177/condenados-en-islandia-los-dos-primeros-banqueros-por-la-crisis-financiera.