martes, 31 de mayo de 2011

Movimientos y revueltas

La palabra “Movimiento” tiene connotaciones históricas por lo sucedido en España durante la primera mitad del siglo pasado y que llegó hasta bien avanzada la centuria. En la actualidad se le está llamando “Movimiento 15-M” a la ocupación de plazas por parte de personas descontentas con la situación político-social y que comenzó en la madrileña Puerta del Sol el pasado día de San Isidro, con réplicas en plazas céntricas de varias ciudades españolas y, últimamente, en otras capitales europeas.

Se les llamó revueltas a lo sucedido anteriormente en varios países árabes, cuyo pistoletazo de salida (aquí hablar de pistoletazo tiene su realidad) se produjo en la plaza Tahrir (Libertad) de El Cairo el pasado día 23 de enero. Lo parecido entre ambas situaciones es el hartazgo y desesperación de parte de la población, principalmente jóvenes, y lo diferente es que mientras estos últimos clamaban por la democracia y la libertad, los españoles se quejan de que no les gusta la que tienen.

A la crisis financiera, que se destapó con la caída del banco norteamericano Lehman Brothers en septiembre de 2008, le siguió una crisis económica cuyos precedentes más próximos se han buscado en el crack de 1929. Crisis que se está prolongando más allá de lo deseable, a la que faltaba el siguiente paso como son las revueltas sociales. Revueltas que no han hecho más que comenzar y, de momento, por aquí se están desarrollando de forma pacífica, civilizada y organizada, con algún altercado provocado por los Mozos de Escuadra en la barcelonesa plaza de Cataluña.

Parece que en bastantes de sus reivindicaciones razón no les falta. ¿De qué estamos hablando? Hay un sistema en el que los llamados mercados o “tiburones financieros” se comen todo lo que se menea. Por comerse, se comen hasta países enteros. Son los que han provocado la crisis y nadie le ha puesto el cascabel al gato. Campan a sus anchas por el mundo, de rositas, mientras los políticos se tiran los trastos unos a otros acusándose del desaguisado, y el pueblo viéndolas venir.

Ya va siendo hora de que el sistema actual de partidos se adapte a los nuevos tiempos. Tenga en cuenta las redes sociales y las nuevas formas de comunicación y de organización. Se constituya una nueva ley de partidos que tenga en cuenta las distintas sensibilidades. Por ejemplo, no es asumible que un solo partido aglutine desde el centro derecha hasta la extrema, pues Gallardón, Aguirre y los contertulios de Intereconomía no parecen estar en la misma longitud de onda, aunque compartan siglas. O también, ¿no ha habido nadie que invente una nueva fórmula que sustituya al actual Sistema D’Hondt, que data de 1878, para otorgar los cargos electos en función de los votos? ¿Cómo es que los partidos, con una adscripción que no llega al 3% de la población, tienen luego toda la representación institucional? ¿Funciona en todos los partidos la democracia interna o hay diferencias sustanciales? ¿Son claramente honestos todos los políticos que van en las listas? ¿Son los partidos máquinas para ganar elecciones o para aglutinar sensibilidades y resolver problemas sociales? ¿Qué poder real tienen los gobiernos que elegimos? Por ahí también va la cosa e, insisto, esto no ha hecho más que comenzar.

Publicado en:
http://www.dclm.es/noticia.php?noticia=99256, 31-05-2011

lunes, 16 de mayo de 2011

Querida urna

“A los que no les interesa la política les gobiernan otros a los que sí les interesa”. Winston Churchill.

El próximo domingo, día 22, la ciudadanía tiene una cita con las urnas. Si todas las elecciones son importantes, esta es crucial. Nos jugamos lo más interesante de la política, la cercanía. Muchas veces nos preguntamos si también es política: poner un semáforo cuando hace falta, si las calles son transitables y están limpias, si nos llega el agua a nuestras casas en buenas condiciones, si por la noche se puede dormir, si hay guarderías, si tenemos un colegio o un instituto próximos, si las facultades están cerca y a precios asumibles, si los centros de salud o los hospitales funcionan y no tenemos que pagar nada aparte (aun costando mucho dinero el servicio que nos prestan), si hay plazas en las residencias de mayores y en qué condiciones están, si vamos a un centro oficial y hay suficiente personal para atendernos adecuadamente... Todo esto también es política, es la que vivimos en nuestro día a día. Por eso son tan importantes estas elecciones.

De lo que se trata ahora es de votar quién va a ser nuestro alcalde y quién el presidente de nuestra Comunidad. Tiempo habrá el año que viene, cuando lleguen las elecciones generales, de votar qué opción política queremos para gobernar España. Pues, con ser importantes los partidos, entiendo que las personas son lo más importante. Ya nos ha demostrado José María Barreda ese pensamiento, esa actuación. Cuando ha hecho falta, se ha enfrentado a quien ha sido necesario, dentro y fuera de su partido, para defender los intereses de las personas de Castilla-La Mancha, como antes lo hiciera José Bono. Tan es así, que es el presidente de Comunidad Autónoma mejor valorado de toda España por sus paisanos, según el CIS (Centro de Investigaciones Sociológicas).

Ante esta realidad, uno se pregunta cómo es que según algunas encuestas están tan igualadas las intenciones de voto. No es difícil inferir una posible dejadez, por parte de unos, y resultar confundidos por la política nacional, por parte de otros. El pasado domingo, declaraba el presidente Barreda en Tembleque (Toledo): “A ver si alguno por un cabreo va a votar a otra opción o se va a quedar en su casa el día 22, porque el día 23 se puede encontrar con una situación infinitamente peor”. Escuchando estas palabras del presidente, yo recordaba la situación vivida por los británicos tras las últimas elecciones generales. Muchos de los votantes laboristas se quedaron en su casa, ganó Cameron (ese cuyas políticas tanto le gustan a Rajoy) y ahora van de una manifestación en otra contra los recortes sociales, las impresionantes subidas académicas y el deterioro de los servicios públicos, entre otros.

Durante muchos años hemos estado en España sin poder ejercer el derecho al sufragio. Paradójicamente, aquellos que menos interesados estaban en volver a colocar una urna sobre la mesa, son ahora los más fervientes usuarios cada vez que son llamados a votar, y muchos de quienes clamaban por ejercer su derecho al voto, ahora resultan más remisos y tienen que ponerse muchas cosas en línea para que se acerquen a la querida urna. Yo les pediría que si no lo hacen por ellos y por sus familias, al menos que vayan a votar por sus paisanos el próximo día 22 en estas elecciones Locales y Autonómicas. Esa es la mejor encuesta, esa es la mejor manifestación.

Publicado en: 
http://www.dclm.es/noticia.php?noticia=98088, 16-05-2011
Lanza de Ciudad Real, páginas de opinión, pág. 39, 19-05-2011


sábado, 7 de mayo de 2011

Pinto pinto gorgorito

A las cero horas del pasado viernes, día 6, comenzó la campaña electoral más igualada de las celebradas hasta ahora en Castilla-La Mancha. Según qué encuestas, dan ganador a uno o a otro de los dos grandes partidos de la Región, pareciendo el juego infantil del “pinto pinto gorgorito”. Esta campaña, a escala nacional, viene precedida por la polémica sobre la legalización de la coalición vasca Bildu, finalmente otorgada por los jueces, como corresponde por Ley, si bien gobierno y PP coincidían en que no se aprobara, por sospechar que se pudieran colar algunos proetarras en sus listas.

En el inicio de la campaña del PP, en Sevilla, Rajoy declaraba que su enemigo no era el PSOE, sino la crisis y el paro. Por primera vez, no ha echado la culpa de la crisis mundial y de sus consecuencias a Zapatero, sino que admite implícitamente la responsabilidad de los gobernantes de ámbitos territoriales más pequeños en la creación de empleo, al tratarse ahora de elecciones locales y autonómicas.

Como el PP ya gobierna en muchos ayuntamientos y en otras autonomías, se supone que ya deben de estar aplicando sus políticas de empleo. Porque, por ejemplo, en las comunidades de Valencia y Murcia, ambas gobernadas por el PP, la tasa de paro es similar a la que registra Castilla-La Mancha, según la EPA (Encuesta de Población Activa) del primer trimestre de 2011, aun disponiendo de mayores recursos en el sector terciario (Servicios) con el mar al lado. Comunidades estas, de tres y una provincia respectivamente, no cinco como la nuestra. Y sin embargo, con una preocupación bien distinta por las políticas sociales.

Hace unos días la alcaldesa de Ciudad Real, Rosa Romero, declaraba estar preocupada por el paro, algo en lo que coincido con ella, y lo dice al final de una legislatura en donde lo que más se ha hecho a favor del empleo ha sido el Plan E de Zapatero, del que correspondieron 12 millones de euros a esta capital manchega. Plan con el que logró cumplir varios puntos de su programa electoral. Quien se postula por el PSOE para relevarla en la alcaldía, Pepe Valverde, ha trazado un proyecto de gobierno incluyendo la participación ciudadana y el asentamiento de empresas (que son la fuente del empleo) pues, hasta ahora, muchas se están yendo a municipios circundantes, principalmente por falta de suelo.

La campaña del PSOE está más bien centrada en el mantenimiento y la mejora de los logros sociales alcanzados en sus gobiernos, amén del empleo y de las infraestructuras, con un Barreda que conoce perfectamente todos y cada uno de los rincones de la región, sabiendo cómo se llaman y sin equivocarse con ningún gentilicio ni con ningún nombre, porque es de aquí, vive y paga sus impuestos aquí, y se lo ha currado. Con una dedicación de pasado y de futuro a tiempo completo. Con motivo de esta campaña electoral, por fin Cospedal se dará un baño de geografía manchega, eso sí, todo de golpe, como el estudiante que lo deja para el final. Confío en que aproveche la ocasión para explicarnos finalmente su programa. En lo que no confío tanto es en su dedicación a esta tierra, si gana. Y si pierde, ya no la veremos más por aquí.

Publicado en: http://www.dclm.es/noticia.php?noticia=97236, el 07-05-2011.
Publicado en: Lanza, páginas de opinión, página 39, el 10-05-2011